jueves, 23 de marzo de 2017


Los creadores del USB Killer original concibieron aquel dispositivo “asesino” en 2015 con un buen propósito. Se trataba de que los fabricantes de ordenadores lo utilizaran para descubrir si sus equipos con puerto USB estaban bien protegidos. Sin embargo, la idea no tuvo buena acogida entre las marcas y los creadores del USB Killer decidieron comercializarlo a particulares. Poco tiempo tardaron en agotar existencias.
Ahora acaban de lanzar el USB Killer 2.0, o lo que es lo mismo, la versión vitaminada de aquel pendrive asesino. Esta segunda generación funciona exactamente igual que la primera: se conecta a un equipo a través de su puerto USB y acumula parte de la energía generada por éste en unos condensadores.
Después, descarga toda esa electricidad almacenada en la placa base del PC, “friendo” el equipo en cuestión de segundos. Esa descarga puede alcanzar los 220 voltios, voltaje que duplica los 110 voltios que conseguía el primer modelo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario